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Mostrando las entradas etiquetadas como Syrah

Degustación de vinos en Global Liquors

El equipo Global Liquors: Mónica De Abreu junto a su hermano Miguel acompañados de Laiza Santana de la agencia Creativas. El pasado jueves asistí a una degustación en Global Liquors y de ese agradable rato me traje un par de cosas nuevas que deseo compartir con ustedes, luego de contarles un poco sobre el anfitrión. Ya le había pasado por el frente varias veces pero no había entrado, y lo primero que me sorprendió fue que esta licorería – manejada por Mónica de Abreu y sus hermanos – no es como otros expendios de vinos y licores en Miami donde solo hay anaqueles de supermercado  y  son atendidos  por gente que solo sabe manejar la registradora. Aquí se ve que el local se hizo pensando en vinos, así que ya por ahí ganaron puntos conmigo. Tiene una nevera donde consigue, además de cervezas y vinos, una modesta, pero deliciosa, variedad de embutidos y quesos finos que sirven para matar antojos o impresionar huéspedes. Luego me di una vuelta a ver que tenían  y a qué precios.

Los vinos Torre Oria entran con buen pie

Siempre que voy al supermercado o a una licorería, dedico unos minutos a estudiar qué vinos tienen en los anaqueles a ver si hay algo que me llame la atención.   En esta ocasión ni siquiera tuve que buscarlos sino que un amigo me llamó para degustar unos vinos de la bodega valenciana Torre Oria que está colocando en el mercado de la Florida. Me sorprendieron porque, hasta ahora y con excepción de los Albariños, los vinos españoles que se consiguen en el mercado local son a veces muy pesados para el clima local, y requieren de un poco de aire para que saquen a relucir sus cualidades. En cambio a los Torre Oria que probé los que encontré divertidos y con personalidad; además de ser lo suficientemente versátiles como para acomodarse al calor y a la humedad imperante en Miami.   Estas características las he encontrado, por lo general, en los mostos del Nuevo Mundo y en los australianos. En esta oportunidad tuve el   gusto de probar dos varietales de la línea NU, Syrah y C

Con tantos puntos, a estos vinos hay que probarlos

  Montes Alpha Que un vino de los de Aurelio Montes tenga buen puntaje no es raro. Estos caldos chilenos es raro que decepcionen. Me imagino que algo parecido debe opinar Robert Parker ya que su publicación Wine Advocate Magazine acaba de otorgarle al Purple Angel un puntaje de 94, la mayor puntuación nunca antes otorgada a estos vinos. No queda más que felicitar al Sr. Aurelio Montes y su equipo por tan excelente trabajo. El resto de los puntajes – y todos excelentes – a continuación: • 2008 Montes Alpha Carmenère 91 • 2008 Montes Alpha Syrah 91 • 2008 Montes Alpha Cabernet Sauvignon 90 • 2008 Montes Alpha Merlot 90 • 2008 Montes Alpha Pinot Noir 90 • 2009 Montes Cabernet Carmenère Limited Selection 90 • 2008 Montes Alpha Chardonnay 89 Doña Paula Del otro lado de la cordillera andina, los amigos de Doña Paula tambien se hicieron merecedores de loas ya que el DP Estate Malbec 2009 recibió varios reconocimientos recientes que vale la pena mencionar: • Wine Spectator le

En el Pinot de la controversia, probamos la evidencia del fraude frances contra un icono californiano

Debo aceptar que yo había visto el Red Bicyclette antes y no me había causado curiosidad, primero por que la etiqueta es poco atractiva, a mi gusto, y el nombre de bicicleta roja lo mas que me puede inspirar es a sudar un poco al aire libre. Pero cuando mi amiga la Sommelier Vanessa Barradas publicó en su blog un comentario sobre la estafa de Languedoc a Gallo, ahí si me provocó comprar el falso Pinot Noir de la bici roja y ver que tal era. Decidí hacer la comparación con un Pinot Noir (PN) que ya conocía y me gustaba que era el Robert Mondavi Special Selection, encontré el del 2008, misma añada del Red Bicyclette en cuestión. Cada vino me costo $8.97 en Walmart. Invite a mi vecina que es buena bebedora de vinos y a mi esposo. Decidí hacer una comparación a ciegas. Y hasta yo misma me sorprendí de los resultados. Mi esposo descorchó las botellas y salió del comedor, luego mi hija, le asignó a cada botella las letras A y B, solo ella lo sabía y fue quien nos sirvió; luego nos llamó a