Thomas Kincade con una de sus pinturas honrando a los soldados. |
Thomas Kincade, quien se ufanaba de ser el artista más
coleccionado en la historia, murió en su casa de Los Gatos, California, a los
54 años de edad.
La familia del controversial pintor aseguró a la prensa
que éste falleció de súbito por causas naturales.
A pesar de la popularidad de sus obras entre los
estadounidenses de clase media, Kincade fue duramente criticado por el establishment artístico quienes se
mofaban de su “arte en masa”.
Pero eso no le importaba a Kincade, quien junto a su
esposa Nanette, invirtió todo lo poco que tenían en 1984 en hacer
reproducciones de sus cuadros. Vendieron un millar de reproducciones por $35
cada una; y de ahí comenzaron con el negocio del arte en masa y para las masas.
Se estima que las ventas anuales de Kincade’s Media Art
Group de pinturas y productos derivados de estas (tarjetas, libros, tazas, calendarios,
etc.) alcanzan los $100 millones. El costo de sus obras oscila de los cientos
de dólares hasta los $10 mil.
Las obras de Kincade se caracterizan por ser escenas con
cabañas, capillas, serenos bosques con montañas y riachuelos todos bañados por
una especie de luz matinal.
A continuación una pequeña muestra de su obra:
Patinadores y árbol de Navidad en Rockefeller Center, NY. |
Una de las villas idealizadas por Kincade. |
Cabaña a la luz de las velas. |
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